García Padilla informó que el presupuesto “contiene importantes asignaciones que no podían posponerse más”. Entre ellas está el pago de la deuda constitucional por $250 millones. Esto reduce el déficit actual de $2,200 millones a $775 millones en tan solo un año.
En cuanto al Impuesto sobre Ventas y Uso (IVU), se someterá legislación para reducir el IVU actual de 7% a 6.5% a partir de diciembre de este año, sin afectar la Corporación del Fondo de Interés Apremiante (COFINA). De igual forma, se eliminan ciertas exenciones que no incluye medicinas recetadas, alimentos no procesados, servicios médicos o educativos. La intensión es ampliar la base del impuesto y lograr mayores recaudos.
El primer mandatario declaró, además, que el periodo de regreso a clases sin IVU se modifica para que dos días antes del inicio de clases en agosto y dos días antes del inicio de clases en enero estén exentos del impuesto los uniformes y efectos escolares. Sin embargo, los libros y libretas estarán exentos todo el año.
De otra parte, hay una asignación de $95 millones para aumentos salariales negociados por las organizaciones que representan a los empleados públicos. Unos 40 mil empleados públicos de 28 agencias gubernamentales y sus dependencias recibirán entre $70 y $160 mensual en aumento de salarios. Estos aumentos entrarán en vigor de forma progresiva. El primer aumento será de 50% el 1ro de julio y el restante 50% para el 1ro de febrero de 2014.
También se asignaron partidas para cubrir las deficiencias del Departamento de Educación y Departamento de Salud. Específicamente, estipuló $160 millones para Educación y $100 millones para cubrir la insuficiencia en la tarjeta de salud, que en el pasado se cubrían con fondos no recurrentes.
El presupuesto presentado establece un plan bienal para alcanzar el balance de gastos e ingresos recurrentes en dos años. Por eso, solo incluye $190 millones de nuevo financiamiento para gastos operacionales, la partida más baja en ese renglón por los pasados 10 años.
De acuerdo al gobernador, el presupuesto cierra las vías de escape que tenían las contribuciones corporativas sin afectar a la clase media, media-baja y pobre del país. Aquellos que ganan más de $200 mil en ingresos por cuenta propia y los que adquieren residencias por valor de más de $1 millón verán tendrán que aportar más.
Para pagar la deuda de $2 mil millones en la Autoridad de Carreteras, la administración reestructurará los cargos por marbetes, bajará el costo de los carros pequeños y módicos y aumentará los cargos para autos de lujo.
Asimismo, las compañías importadoras de petróleo tendrán que pagar un arbitrio adicional.
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