La designada, quien se ha distinguido siempre por su defensa de la equidad de género y la conservación del ambiente, cuenta con un juris doctor de la Universidad de Puerto Rico, unamaestría en Derecho de la Universidad de Columbia en Nueva York y un grado de Doctor en la Ciencia del Derecho de la misma Universidad. Ha publicado un sinnúmero de artículos jurídicos y fue reconocida con el premio del Colegio de Abogados por Aportaciones Significativas al Desarrollo del Derecho Puertorriqueño y como Académico de Número de la Academia de Jurisprudencia y Legislación. Además presidió el comité que formuló el informe Educación Judicial para el Siglo XXI que sirvió de base para la creación de la Academia Judicial Puertorriqueña, de la cual es decana. De igual forma, participó de una comisión especial y un comité permanente sobre discrimen por género en los tribunales y sobre igualdad y género, ambos del Tribunal Supremo.
Se desempeñó como catedrática en las facultades de Derecho de la Universidad Interamericana, la Universidad Católica y la Universidad de Puerto Rico. También, ocupó varios puestos en el gobierno del Estado Libre Asociado y llegó a ser asesora del gobernador Rafael Hernández Colón en las áreas de Planificación, Protección Ambiental, Derechos de la Mujer y Gerencia Pública. En 1992 fue designada jueza del Tribunal de Apelaciones y a partir de 1996 ocupó la posición de Jueza Administradora de ese tribunal.
“El país se beneficia enormemente por contar con una mujer de estas cualidades disponible para tomar las riendas de nuestra rama judicial. Le agradezco profundamente el que haya aceptado”, concluyó García Padilla.
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