La Asociación de Constructores de Puerto Rico alertó sobre las serias consecuencias que tendrá para el desarrollo socioeconómico de Puerto Rico el aumento tarifario que se ha propuesto como parte la reestructuración de la Autoridad de Energía Eléctrica, y el cual está ante la consideración de la Comisión de Energía.
La Asociación de Constructores se refirió a declaraciones hechas por los directivos de la corporación pública, reseñados en reportajes de la prensa. Estas indican que si la Comisión de Energía aprueba el aumento permanente, el cual se empezaría a cobrar a partir de la emisión de bonos titularizados en la tarifa energética, se estima que tendría un incremento definitivo de 23% sobre la factura de clientes residenciales. Un incremento definitivo de 22% sobre clientes comerciales e industriales de menor volumen y para manufactura pudiera ser un incremento de 24%. Esto, sin contar con un aumento menor que se estima en el ajuste provisional de las tarifas que entren en vigor a corto plazo.
“Entendemos la importancia y utilidad del proceso de reestructuración de la Autoridad de Energía Eléctrica como un mecanismo efectivo para remediar la precaria situación fiscal de la Autoridad y garantizar el repago de sus obligaciones. Sin embargo, este proceso no debe desembocar en un aumento tan significativo ya que añade otra carga más al empresario local e impactará de manera negativa la posibilidad de desarrollo económico para Puerto Rico”, expresó el presidente de los Constructores, Arq. Ricardo Álvarez-Díaz.
“Aquellas empresas que invirtieron en la construcción, remodelación y operación de establecimientos o centros comerciales, facilidades turísticas o industriales, que planificaron su inversión con determinados costos energéticos, ahora se enfrentarían a un ajuste dramático en su presupuesto para gastos de electricidad cambiando radicalmente el panorama que tenían al decidir invertir”, manifestó Álvarez-Díaz.
Ante este escenario, la Asociación hizo un llamado a la Comisión de Energía a no darle paso a un aumento tarifario que trastoque los sectores residenciales, comerciales, turísticos e industriales, que son la base del esfuerzo de reactivación económica, la que pudiera lograrse a corto y mediano plazo.
“Deben adoptarse otras soluciones para evitar este incremento tan perjudicial para nuestra economía. Una combinación de estrategias o herramientas pudieran evitar este incremento, entre éstas, alianzas público-privadas para inversión en nueva infraestructura o rehabilitación de la infraestructura existente, una reducción sustancial en los costos operacionales de la entidad, una reforma real en todos sus procesos y servicios, la modificación aun más sustancial de los subsidios a los gobiernos municipales, mayor efectividad y eficiencia en el cobro y utilización de la electricidad, entre otros mecanismos.”, concluyó Álvarez-Díaz.
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